Aplícate más a ser bueno que a ser visto; no te des por enterado si alguien te alaba o te vitupera. No te seduzca la alabanza ni te quebrante el vituperio, porque quien no apetece la alabanza no siente la afrenta. (San Isidoro de Sevilla)
Feliz día del Señor. Celina
Si practicamos y nos revestimos con la virtud de la humildad, descubriremos que existen más razones para ser vituperados que para ser alabados. Gracias, Celina, por tan profundo texto y sugestiva imagen. Feliz día del Señor a todos.