San Francisco de Sales

 
Fotografía de la galería de Antonio Mérida

La abeja saca miel de las flores sin dañarlas ni destruirlas, dejándolas tan íntegras, incontaminadas y frescas como las ha encontrado. Lo mismo, y mejor aún, hace la verdadera devoción: ella no destruye ninguna clase de vocación o de ocupaciones, sino que las adorna y embellece. (San Francisco de Sales)

Feliz día del Señor. Celina

Un comentario en «San Francisco de Sales»

  1. ¡Qué bella imagen, Celina, nos pones a contemplar! Una abeja libando miel de una pequeña violeta. ¡Cuánta hermosura encierran las cosas sencillas que ha creado el Señor con tanta delicadeza y amor!
    Déjame, Señor, libar la miel de tu corazón y dame que me sirva para endulzar el trato con mis semejantes. Feliz día del Señor a todos.

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