Fidelidad, puntualidad, pequeñas palabras llenas de bondad, algún pequeño pensamiento para los demás, ciertos pequeños gestos hechos de silencio, de miradas, de pensamientos, de palabras, de obras. Justo estas cosas son las «gotas de amor» que hacen que nuestra vida transcurra con tanto resplandor. (Madre Teresa de Calcuta)
Feliz día del Señor. Celina
Es llamativo que Dios, siendo inmenso, infinito, inabarcable, guste de la cosas pequeñas e insignificantes; es más, que las ame: las flores del campo, las gotas de rocío, los pequeñuelos, las lágrimas de los que lloran. Él mismo se ha hecho un pedacito de pan y unas gotas de vino. Te haces pequeño, Señor, para estar cerca de nosotros. Gracias, Celina, por esas bellas gotas de rocío. Feliz día del Señor a todos.