San León Magno

Durante todo este tiempo, amadísimos hermanos, que media entre la resurrección del Señor y su ascensión, la providencia de Dios se ocupó en demostrar, insinuándose en los ojos y en el corazón de los suyos, que la resurrección del Señor Jesucristo era tan real como su nacimiento, pasión y muerte.
Los apóstoles y todos los discípulos fueron fortalecidos de tal modo por la evidencia de la verdad que cuando el Señor subió al cielo, no sólo no experimentaron tristeza alguna sino que se llenaron de gran gozo.

(San León Magno)

Feliz fiesta de la Ascensión del Señor. Celina

Benedicto XVI

La resurrección no ha pasado, la resurrección nos ha alcanzado e impregnado. A ella, es decir, al Señor resucitado, nos sujetamos, y sabemos que también Él nos sostiene firmemente cuando nuestras manos se debilitan. Nos agarramos a su mano, y así nos damos la mano unos a otros, nos convertimos en un sujeto único y no solamente en una sola cosa.

(Benedicto XVI)

Feliz día del Señor. Celina

Benedicto XVI

Cristo, la luz, es fuego, es llama que destruye el mal, transformando así al mundo y a nosotros mismos. Como reza una palabra de Jesús que nos ha llegado a través de Orígenes, «quien está cerca de mí, está cerca del fuego». Y este fuego es al mismo tiempo calor, no una luz fría, sino una luz en la que salen a nuestro encuentro el calor y la bondad de Dios.

(Benedicto XVI).

Feliz día del Señor. Celina

Hermanos Capuchinos

Alégrate, porque la vida es más que lo que hacemos;
alégrate porque la felicidad está en lo cotidiano, en lo pequeño,
en las cosas que se escriben con minúscula:
la naturaleza, la belleza, la alabanza…
Alégrate, porque la dicha también se escribe con mayúsculas:
nace de la fe en Dios y del trabajo con Él;
con esta confianza podemos seguir recorriendo el camino.

(Hermanos Capuchinos)

Feliz día del Señor. Celina

Francisco Cerro Chaves

Gracias (Jesús) por ser Iglesia que camina en comunión con toda la gente,
especialmente los más pobres.
Gracias por ser Iglesia viva, que sigue adelante
en el corazón del mundo, para ser sal y luz.
Gracias por ser Iglesia acogedora de todos los que viven sin esperanza.
Gracias por la vida, regalo de tu amor
y porque me quieres siempre y me ayudas a vivir.

(Francisco Cerro Chaves)

Feliz día del Señor. Celina