Contigo se ha cruzado mi mirada,
allá cuando pasaste en mi sendero,
dejé barcas y redes, fui ligero,
fascinado en la voz de tu llamada.
Seguro ya en tu amor, corro sin nada,
cantando al viento, libre…; solo quiero
ser de tu luz testigo, ser lucero;
y dejar a tus pies mi alma sellada.
(María José Rojo)
Feliz día del Señor. Celina
El poemita que nos ofrece hoy Celina describe muy breve y delicadamente la fascinación del amor a primera vista. La fuerza de la mirada y la dulzura de la voz del amado que, al pasar, te llama. Y tú corres tras él, cantando al viento tu transformación en luz y en lucero de su amor. Señor, míranos, llámanos, para que te sigamos y amemos. La imagen reproduce la fuerza del amor de Dios, cuando te llama. Gracias, Celina. Feliz día del Señor a todos.