San Juan XXIII

¿Qué vale la vida si nos ocupamos solo de las apariencias? El consuelo viene, no a los ojos, sino al corazón que sigue a aquel Espíritu grande y luminoso a la región de los vivos. Allí debemos dirigir siempre nuestras pupilas, allí, donde la luz no se apagará jamás.

(San Juan XXIII)

Feliz día del Señor. Celina

Benjamín González Buelta

Basta una brasa
para encender toda la noche.
Basta un puñado de semillas
para reverdecer toda la espera.
Basta la mirada de un centinela
para alertar toda la ciudad.
Basta el grito de un pobre
para movilizar toda la justicia.
Basta la vida de un Hombre
para reconciliar todo el universo.

(Benjamín González Buelta)

Feliz día del Señor. Celina

Papa Francisco

Cuando se presenta la oportunidad para que derrotes a tu enemigo, ese es el momento en que debes decidir no hacerlo. Cuando te elevas al nivel del amor, de su gran belleza y poder, lo único que buscas derrotar es los sistemas malignos. A las personas atrapadas en ese sistema, las amas, pero tratas de derrotar ese sistema. Odio por odio solo intensifica la existencia del odio y del mal en el universo.

(Papa Francisco)

Feliz día del Señor. Celina

San Claudio de la Colombiere

Estoy tan convencido, Dios mío, de que velas sobre todos los que esperan en ti, y de que no puede faltar cosa alguna a quien aguarda de ti todas las cosas, que he determinado vivir de ahora en adelante sin ninguna preocupación, descargando en ti todas mis solicitudes. «En paz me acuesto y enseguida me duermo porque tú solo, Señor, me haces vivir tranquilo». (Salmo 4, 10)

(San Claudio de la Colombiere)

Feliz día del Señor. Celina

Tomás de Kempis

No sentir alguna tribulación ni sufrir alguna tribulación no es de este mundo, sino propio del eterno descanso. No juzgues, pues, haber hallado la verdadera paz porque no sientas alguna pesadumbre. Ni que es ya todo bueno porque no tengas ningún adversario, ni que está la perfección en que todo te suceda según tú quieres. En estas cosas no se conoce al verdadero amador de la virtud, ni consiste en ellas el aprovechamiento y perfección del hombre.

(Tomás de Kempis)

Feliz día del Señor. Celina

Ángel M. Briñas

Cualquier situación inevitable en tu vida Dios quiere que la vivas como si fuera su voluntad. Él quiere que no desaproveches ni las alegrías ni las penas de la vida. Y para ello, si unas y otras las vives como voluntad suya, las alegrías no las absolutizarás y te mantendrán cercano a Dios, y las penas no te escandalizarán y no te alejarán de Él.

(Ángel M. Briñas)

Feliz día del Señor. Celina

Carlos Osoro

El Dios en quien creemos interviene en la vida de los hombres; el Dios en quien creemos cambia nuestro corazón y cambia la vida de los demás a través de nosotros, porque así lo ha querido Él. Nos robustece para que robustezcamos también a los demás.

(Carlos Osoro)

Feliz día del Señor. Celina

San Juan Crisóstomo

Habiendo Dios dotado a los demás animales de la velocidad en la carrera, o la rapidez en el vuelo, o de uñas, o de dientes, o de cuernos, solo al hombre lo dispuso de tal forma que su fortaleza no podía ser otra que la del mismo Dios; y esto lo hizo para que, obligado por la necesidad de su flaqueza, pida siempre a Dios cuanto pueda necesitar.

(San Juan Crisóstomo)

Feliz día del Señor. Celina

Benedicto XVI

Los apóstoles recibieron el don de la Eucaristía en la intimidad de la última cena, pero estaba destinado a todos, al mundo entero. Precisamente por eso hay que proclamarlo y exponerlo abiertamente, para que cada uno pueda encontrarse con «Jesús que pasa», como acontecía en los caminos de Galilea, de Samaría y de Judea; para que cada uno, recibiéndolo, pueda quedar curado y renovado por la fuerza de su amor.

(Benedicto XVI)

Feliz Domingo, festividad del Corpus Christi. Celina

Raniero Cantalamessa

Representación de la Trinidad, 1489, Museo Rigaud Perpignan

No es verdad el que la Trinidad sea un misterio remoto, irrelevante para la vida de todos los días. Por el contrario, son las tres personas más «íntimas» en la vida: no están fuera de nosotros, como sucede con la mujer o el marido, sino que están dentro de nosotros. «Hacen morada en nosotros» (Juan 14, 23), nosotros somos su «templo».

(Raniero Cantalamessa)

Feliz Domingo de la Santísima Trinidad. Celina