La Ascensión es un gran mensaje de esperanza. El hombre de nuestro tiempo, que, a pesar de sus conquistas técnicas y científicas, de las que se enorgullece con razón, corre el riesgo de perder el sentido último de su existencia, encuentra en este misterio la indicación de su destino. La humanidad glorificada de Cristo es también nuestra humanidad. Jesús, en su persona, ha unido para siempre a Dios con la historia del hombre, y al hombre con el corazón del Padre celestial.
(San Juan Pablo II)
Feliz domingo, fiesta de la Ascensión del Señor al cielo. Celina