Ten cautela en no dejarte abatir por la adversidad ni envanecer por la prosperidad.
Es propio de la fe hacernos humildes en los sucesos felices e impasibles en los reveses.
(Santa Clara de Asís)
Feliz día del Señor. Celina
La experiencia típica de encontrar a Dios en todas las cosas es junto a un Dios presente en nuestras experiencias diarias, constantemente amontonadas.
San Ignacio afirma que Dios no se halla exclusivamente en la oración, sino en medio de las preocupaciones de la vida diaria: conversación, desempeño del trabajo, vida de familia, acción, estudio, situaciones físicamente duras y psicológicamente preocupantes.
(Peter-Hans Kolvenbach)
Feliz día del Señor. Celina
No hay que tenerle miedo al dolor, lo mismo que no le tenemos miedo a la noche. Sabemos que el sol sigue existiendo aunque no le veamos. Sabemos que volverá. Dios no desaparece cuando sufrimos. Está ahí, de otro modo, como está el sol cuando se ha ido de nuestros ojos.
(José Luis Martín Descalzo)
Feliz día del Señor. Celina
Busco una verdad que sea clara como la luz: una verdad capaz de renovarse siempre, nunca cansada de sí misma; una verdad que continuamente resurja de su propio cansancio, de su propia desconfianza, de su propio acomodo perezoso; una verdad que continuamente reviva en nosotros, que sea poderosa: esta es mi búsqueda, nuestra búsqueda. Y Jesús nos dice: Yo soy la luz que las tinieblas no pueden ocultar. ¡Señor, tú eres mi verdad, tú eres la verdad del hombre!
(Carlo María Martini)
Feliz día del Señor. Celina
Acaso, cuando te miras al espejo, no reconoces lo hermoso, pero Dios sí. Dios te conoce, y porque te conoce sigue confiando en ti, sigue creyendo en ti; sabe que, como el ave herida, sanarán tus alas y levantarás el vuelo, aunque ahora parezca imposible.
No te rindas, que hay quien te ama sin condiciones, y te llama a creerlo.
(José María Rodríguez Olaizola)
Feliz día del Señor. Celina
Tengamos siempre con nosotros la imagen de María. Tan gran madre socorre a todos sus hijos en los diversos momentos de su existencia. Nos asiste para alcanzar la meta que se nos ha propuesto aquí abajo: amar y servir al Señor, practicar las virtudes de la caridad y de la paciencia, especialmente en las pruebas que la vida nos ofrece, caminando siempre con la seguridad de los bienes eternos.
(San Juan XXIII)
Feliz día del Señor. Celina
De joven, mi vida era como una flor, a la que nada le importaba perder una hojilla de su tesoro, cuando la brisa de la primavera venía a pedir a su puerta..
Ahora que muere mi juventud, mi vida es como una fruta a la que nada le sobra y anhela darse de una vez, con su carga completa de dulzura.
(Rabindranaz Tagore)
Feliz día del Señor. Celina