San Benito José Labre


Para resultar agradable a Dios, lo cual es un deber de todos, hay que tener tres corazones en uno. Un corazón de fuego para amar a Dios. Un corazón de carne para amar al prójimo. Un corazón de bronce para resistir al amor de sí mismo. 

(San Benito José Labre)

Feliz día del Señor. Beso, Celina

San Juan Pablo II

Mientras exista el hombre, existirá el gesto libre de auténtica participación en la creación que es el trabajo. Es uno de los componentes esenciales para la realización de la vocación del hombre, que se manifiesta y se descubre siempre como el que está llamado por Dios a «dominar la tierra». A él Dios le ha confiado esta suprema y comprometedora libertad.

(San Juan Pablo II)

Feliz día del Señor. Celina

Santa Teresa de Calcuta

Cuando un pobre muere de hambre, no es porque Dios se haya olvidado de él. Sucede porque hemos rehusado actuar como instrumentos de amor en las manos de Dios para ofrecer a un pobre, hombre o mujer, un trozo de pan, para procurarle una pieza de ropa con que cubrirse del frío.

(Santa Teresa de Calcuta)

Feliz día del Señor. Celina

Peter-Hans Kolvenbach

La experiencia típica de encontrar a Dios en todas las cosas es junto a un Dios presente en nuestras experiencias diarias, constantemente amontonadas.
San Ignacio afirma que Dios no se halla exclusivamente en la oración, sino en medio de las preocupaciones de la vida diaria: conversación, desempeño del trabajo, vida de familia, acción, estudio, situaciones físicamente duras y psicológicamente preocupantes.

(Peter-Hans Kolvenbach)

Feliz día del Señor. Celina

José Luis Martín Descalzo

No hay que tenerle miedo al dolor, lo mismo que no le tenemos miedo a la noche. Sabemos que el sol sigue existiendo aunque no le veamos. Sabemos que volverá. Dios no desaparece cuando sufrimos. Está ahí, de otro modo, como está el sol cuando se ha ido de nuestros ojos.

(José Luis Martín Descalzo)

Feliz día del Señor. Celina

San Antonio de Padua

Cualquier cristiano, plantado por la fe en la Iglesia de Cristo, debe crecer de bien en mejor y producir frutos de vida eterna. Levántate para que seas el que crece hacia arriba, como la palmera y las golondrinas.

(San Antonio de Padua)

Feliz día del Señor. Celina

San Isidoro de Sevilla

Si permaneces en el bien, se alejará de ti la tristeza; si perseveras en la justicia, no te saldrá al encuentro la melancolía. Ni daño alguno ni la muerte misma te atemorizarán si vives bien y piadosamente.

(San Isidoro de Sevilla)

Feliz día del Señor. Celina

Carlo María Martini

Busco una verdad que sea clara como la luz: una verdad capaz de renovarse siempre, nunca cansada de sí misma; una verdad que continuamente resurja de su propio cansancio, de su propia desconfianza, de su propio acomodo perezoso; una verdad que continuamente reviva en nosotros, que sea poderosa: esta es mi búsqueda, nuestra búsqueda. Y Jesús nos dice: Yo soy la luz que las tinieblas no pueden ocultar. ¡Señor, tú eres mi verdad, tú eres la verdad del hombre!

(Carlo María Martini)

Feliz día del Señor. Celina

José María Rodríguez Olaizola

Acaso, cuando te miras al espejo, no reconoces lo hermoso, pero Dios sí. Dios te conoce, y porque te conoce sigue confiando en ti, sigue creyendo en ti; sabe que, como el ave herida, sanarán tus alas y levantarás el vuelo, aunque ahora parezca imposible.
No te rindas, que hay quien te ama sin condiciones, y te llama a creerlo.

(José María Rodríguez Olaizola)

Feliz día del Señor. Celina