La cultura contemporánea parece haber perdido el sentido del bien y del mal, por lo que es necesario reafirmar con fuerza que el bien existe y vence, porque Dios es «bueno y hace el bien» (Sal 119, 68). El bien es lo que suscita, protege y promueve la vida, la fraternidad y la comunión. La responsabilidad para con el prójimo significa, por tanto, querer y hacer el bien del otro, deseando que también él se abra a la lógica del bien; interesarse por el hermano significa abrir los ojos a sus necesidades.
(Benedicto XVI)
Feliz día del Señor. Celina
La realidad de nuestros días es que el ser humano ha perdido la noción del pecado. El pecado no existe. Por eso no se peca contra Dios, ni contra los hombres ni contra la obra de Dios, la Creación. La ética y la moral han muerto en el área del falso progresismo. «Señor, libranos del mal». Entrañable imagen de manos que trabajan por y para el bien y la verdad. Gracias Celina. Feliz día del Señor a todos.