Es una verdad indiscutible que todos recibiremos un día la visita de la hermana muerte. A veces se presenta de un modo brusco e inesperado. Pero, si nuestro árbol ha sabido dar sus frutos, si su misión termina bien, en conformidad con la voluntad divina, entonces permaneceremos tranquilos, imperturbables.
(San Juan XXIII)
Feliz día del Señor. Celina
El texto que nos ofrece hoy Celina me evoca un cuarteto octosilabo, atribuido a Santa Teresa. Dice así: «Ven muerte tan escondida/que no te sienta venir/pues el placer de morir/no me vuelva a dar la vida.» Los sentimientos de Santa Teresa de Jesús y de San Juan XXIII están en función de su amor a Jesucristo, el Hijo de Dios. Quienes aman al Señor, quienes viven su experiencia de amistad no pueden menos que desear un pronto encuentro con el amigo de su vida, el Señor Jesús. Muy oportuna, Celina, la imagen de unas naranjas en sazón. Feliz día del Señor a todos.