Manuel Marín Triana

Nunca digas: «Quiero que esto suceda así por encima de todo»,
y nunca desees de modo absoluto,
sino tu unión con el querer divino,
mas no que las cosas o las personas sean de este modo o del otro.
Así, no te derrumbes con lo que se caiga.
Únete solamente, de modo indefectible,
a tu fidelidad amorosa con Dios.
Mira cómo el rosal deja que se caigan sus rosas y no muere con ellas.
Es mejor así, para que puedan brotar capullos nuevos
y no deje de haber rosas en el mundo.

(Manuel Marín Triana)

Feliz día del Señor. Celina