No sentir alguna tribulación ni sufrir alguna tribulación no es de este mundo, sino propio del eterno descanso. No juzgues, pues, haber hallado la verdadera paz porque no sientas alguna pesadumbre. Ni que es ya todo bueno porque no tengas ningún adversario, ni que está la perfección en que todo te suceda según tú quieres. En estas cosas no se conoce al verdadero amador de la virtud, ni consiste en ellas el aprovechamiento y perfección del hombre.
(Tomás de Kempis)
Feliz día del Señor. Celina
La paz es el regalo que da el Señor a los que han transitado por este mundo. La multitud de cruces que adornan los cementerios nos recuerdan que ahora los difuntos viven en paz con Cristo en la casa de Dios. Mientras tanto, acá en este mundo la vida es una lucha constante para conseguir la paz, tanto individual como social. Bella y sugerente imagen de la paz que emerge entre adoquines. Gracias Celina. Feliz día del Señor a todos.